eres celebración
una sonrisa abierta sin destino
un telar de raíces muy profundas
adheridas a tu rostro tembloroso
eres celebración
y aún no sé
qué secreto profundo y apagado
calla tu presencia sugerida
debes ser cadencia cercana de la muerte
diamante negro
llovido en piel suave
debes vestir
con las prisas serenas de tus labios
una madeja de posibles muy inciertos
que se impiden la última palabra
debes escuchar sobre la nada
lo real dormido en otra parte
en esa voz que te atraviesa
aún no sé por qué
cuando miras a otro lado
me guardas del empuje de los tiempos
en la orilla barrada de tu frente
justo al pie de tu flequillo
y tu silencio
eres mi celebración
y muerte
el mejor motivo arrasado del absurdo
que repta y trepa en tu mirada
sacudiendo lo imposible al otro lado.
Cuando te marchas o te duermes
con esos pies tuyos
tan pequeños
siempre me vuelvo a ver
cómo te alejas
con el pasado inminente
de otras cosas
para abrirlo todo en otra parte.
Es tu espalda una cadena
de promesas vertebradas y de huesos
nevados sobre un cuerpo muy pequeño
eres
en fin
otra esperanza ajena
helada
bajo la soledad brillante de tus ojos.
intervaloscopio 